En el año de 1975 el Científico Luis Orlando Castro Cabrera inicio en la Investigaciones Científicas para la Creación de una Biotecnología que ayudara a devolver vida a los suelos.

 

 

Su interés inicia en los Estados Unidos de Norte América, al recibir un Articulo de la Agencia de Protección Ambiental del Gobierno Federal; que decía que la materia orgánica es altamente contaminante especialmente la que se entierra en los vertederos que también son conocidos como rellenos sanitarios, se interesó mucho por leer ese documento durante esa misma noche y eso cambió la vida del Científico Luis Orlando Castro Cabrera.

 

Se da cuenta que no es lógico que una planta crezca, si nosotros le permitimos a esa planta que tome aproximadamente el 17% de Nitrógeno del suelo y que el 83% lo está tomando de la atmósfera; que la planta lo hace para recuperar lo que ha perdido por su crecimiento y que tomamos aproximadamente el 22% de esa masa,  la cual convertimos en basura en promedio de todos los cultivos, la llevamos a las plazas de mercado, de ahí llevamos una parte a vertederos, llevamos a casa las papas, las hojas del elote, todo eso lo enterramos y contamina durante 25 años, esto de  acuerdo a estudios que ha hecho la Universidad de California y la Universidad de Antioquia en Colombia.

 

Al pensar que esto es absurdo e irracional, el Científico Luis Orlando Castro se le hizo más importante estudiar sobre los microorganismos de la tierra, y así empezó a trabajar sobre una Biotecnología.   Lo primero que le sorprendió es ver que los microorganismos benéficos del suelo están en un nivel de casi total desaparición, hablando de microorganismos nitrificantes, el 79% de la atmósfera terrestre es Nitrógeno y nosotros nos vamos a Ucrania a cargar un barco con urea para traerla a México y ponérsela a las plantas para que tengan Nitrógeno;  gran parte de ese Nitrógeno, no todo se puede sustituir porque la demanda en productividad y la exigencia moderna es muy alta, más aún cuando ahora se está anunciando por parte de Naciones Unidas que se aproxima una crisis alimentaria para el año 2050.

 

Entonces es necesario mantener los niveles de producción y por eso es también necesario reforzar con elementos de síntesis química la productividad, hay severas dudas si es realmente y absolutamente  necesario o no utilizarlas.

 

Por ese ejemplo de las bacterias nitrificantes que las tenemos en un mínimo en el suelo, ellas antes de la Revolución Verde en el año de 1940 proporcionaban todo el Nitrógeno de las cosechas, las bacterias solubilizadoras de fósforo y las oxidantes.

 

Le preocupó mucho el deterioro de los suelos y consideró que valía la pena que para cumplir con su responsabilidad histórica tenía que dedicarse a trabajar en algo que le devolviera vida a los suelos.

 

Trabajó para conseguir la quimio resistencia, que es el término que han utilizado para determinar la resistencia de las bacterias a la trazabilidad química la cual sigue siendo bajísima.

  

Se han llegaron a sacar sustancias tan agresivas y tóxicas en el mercado, que les tocaba a los productores dejar los terrenos cuando usaban el telone, esto consistía en cubrir los suelos por siete días y no podía acercarse nadie por la toxicidad del producto.

 

Como gran cosa de los que aplicaron el telone, garantizaban que los 50 cm. de la parte superior del suelo quedaba estéril, siendo esto un crimen para el suelo y para la humanidad.  El suelo es vivo porque habitan microorganismos, manifestó el Científico.

 

Esto siguió motivando al Científico Luis Orlando Castro Cabrera, a seguir estudiando en el como los microorganismos benéficos podrían vivir en el suelo a pesar de la aplicación de agroquímicos.

 

Siendo muy difícil decir a los agricultores que cambien su política y se vuelvan orgánicos; entonces realizo investigaciones para lograr que los microorganismos resistan los agroquímicos, llevándose al Laboratorio pequeñas dosis de trazabilidad química especialmente de fungicidas, insecticidas, herbicidas y abonos que se convierten en tóxicos por los excesos de urea.

 

En el Laboratorio se adaptan las bacterias con las generaciones de agroquímicos constantemente ya que cada vez son más agresivos; la Empresa Salus Mundi se dedica fundamentalmente a la Investigación Científica teniendo las patentes de todos los trabajos que realizan, con un equipo de científicos del más alto nivel, en donde se hace el control de calidad de los inoculantes que ahí se producen, mandando el extracto para diluir y aplicar en los Residuos Sólidos Orgánicos para su transformación, realizan el control de calidad del producto que se obtiene y la tercera parte es la producción de los inoculantes, en donde la vida del inoculo líquido es de 100 horas.

 

Actualmente la Empresa Salus Mundi se encuentra ubicado en Tecámac, Estado de México, en  Argentina y Colombia.

 

Con el inoculante producido se puede mezclar con Residuos Sólidos Orgánicos de cualquier tipo, atacando todo lo que sean cadenas de carbono y tenemos tres tipos de inoculante (1 Bioter) sirve para  ataca las cadenas cortas que son los hidratos de carbono (azúcares) almidones y los lípidos (grasas) al terminar esto quedan una cantidad de fibras, celulosa, lignina y hacemos una inoculación con el producto para mineralizarlo (2 Biocon) y finalmente inoculamos el (3 Biocel) con los microrganismos benéficos, llevando siempre un tratamiento adecuado al suelo o cultivo, con la capacidad de retención de agua por Kilo de 50 veces su peso, cuando en la actualidad es de 20 veces su peso, teniendo muchas diferencias entre un compost y Biofertilizante orgánico.

 

Las bacterias llevan el Nitrógeno al suelo y a la planta, en donde cada vez que hay una nueva generación de bacterias microrganismos benéficos aportan nuevamente Nitrógeno al suelo y las paredes celulares de las bacterias que van muriendo es una materia orgánica excepcional para el suelo, una bacteria tiene una vida de 8 horas y se puede reproducir en condiciones ideales hasta 200 veces.

 

El Nitrógeno orgánico lo asimilan las plantas en un 22% máximo y nosotros calculamos al 12 % el Nitrógeno de aporte. Es por esto que el Científico se preocupa por la crisis alimentaria que Naciones Unidad nos advierte en donde no se tendrán alimentos suficientes para la Población Mundial, nos deja esta reflexión el Científico para que veamos la dimensión de la responsabilidad que tenemos todos de alimentar al mundo y mantener la vida sobre la tierra.